Para estar cerca de Sheikh Salim Chisti, el santo sufí objeto de su veneración, el Emperador Akbar fundó en 1575 una nueva ciudad en Sikri. La «Mezquita del Viernes» alberga el mausoleo del santo, de mármol blanco, al que se accede después de franquear la Sublime Puerta, una entrada monumental que conmemora la victoria sobre el Sultán de Gujarat. En el patio hay otros mausoleos, como el del sobrino del santo. En el lado oeste, admire el pishtaq, pórtico central de la sala de oraciones.