En 1904, Robert Moran (1857-1943), magnate de la construcción naval y ex alcalde de Seattle, se retiró a los 47 años por motivos de salud y empezó a planificar su último hogar, una mansión en la isla Orcas, a orillas de la bahía de Cascade. En 1909, la ecléctica estructura de cinco plantas se terminó. Está rodeada por un porche y tiene detalles interiores que recuerdan el pasado naval de Moran (incluida la pintura marrón exterior que suele usarse en los barcos). Contra los pronósticos de su médico, Moran vivió en su finca Rosario casi 30 años. Los siguientes propietarios, Donald y Alice Rheem, pintaron la fachada de blanco. Desde 1960 es un centro vacacional. Ahora las habitaciones para los huéspedes flanquean la mansión principal, donde la artesanía en madera y la minuciosa decoración de la sala de música, con un órgano tubular, recuerdan la elegancia de una época pasada.