La opinión de la Guía Michelin
Una gran fachada decorada con pilares anuncia la entrada del gran templo. Construido en el s. XVI para honrar a los antepasados del clan Luo, sus dos patios y sus tres pabellones están decorados con animales simbólicos: peces, dragones y fénix aparecen en barandillas, pomos de puertas y paneles. En el segundo vestíbulo, dedicado a los antepasados masculinos, las vigas han conservado sus pinturas anaranjadas. El vestíbulo del fondo, de dimensiones más modestas, es uno de los pocos pabellones dedicados a los antepasados femeninos.