La opinión de la Guía Michelin
Esta abadía fundada en el año 529 alcanzaría su apogeo en el s. XI, en tiempos del abad Desiderio, y el arte de los monjes de Monte Cassino (miniaturas, frescos, mosaicos) influiría decisivamente en el arte cluniacense. Reconstruida tras la batalla de Cassino (enero-mayo de 1944) siguiendo los planos antiguos, está precedida por cuatro claustros comunicados entre sí. La sobria fachada de la basílica da paso a un suntuoso interior de mármoles, estucos, mosaicos y dorados.