Sorprende que siendo tan verde lleve semejante nombre. Es cierto que la isla más septentrional del archipiélago se llama así porque carece de manantiales; sin embargo, está cubierta de guano, un abono natural que ha creado un ecosistema único. Aspire el aroma de la gardenia de Wright, que sólo crece aquí y camine rodeado de aves marinas porque en este entorno se encuentran las colonias de gaviotines negros y de golondrinas de mar más importantes del mundo.