Hornstrandir, en el extremo noroccidental de Islandia, es una de las regiones más vírgenes de Europa. Inhabitada desde los años 50, está declarada reserva natural y solo se puede llegar hasta ella en ferry (desde Ísafjördur y Bolungarvík) o a pie. La portentosa belleza de sus parajes, personificada por los increíbles acantilados de Hornbjarg (de más de 500 m de alto), sumada a su flora y su fauna (focas, pájaros y zorros árticos en abundancia) lo convierte en un destino de primera para los senderistas. La península atrae a los amantes de las sensaciones fuertes y los espacios vírgenes.