Este bonito hotel ocupa un antiguo molino restaurado y goza de una ubicación muy tranquila en el valle del río Almansor. Tiene una piscina exterior grande y una terraza para comer con vistas al río. El Moinho Do Álamo ofrece habitaciones pintorescas, con paredes encaladas y muebles antiguos. Todas incluyen un balcón privado y un cuarto de baño único, decorado con azulejos típicos portugueses. El desayuno continental se sirve en el comedor rústico del Moinho, que tiene paredes de piedra y una chimenea. Los huéspedes también disponen de menús portugueses tradicionales deliciosos para comer o cenar, bajo petición. También pueden leer un libro de la colección del Moinho Do Álamo o alquilar un bote para explorar el río. Como el hotel tiene cuadras, podrán montar a caballo. Además, disfrutarán de bicicletas de uso gratuito. El Moinho Do Álamo queda a 20 minutos en coche del crómlech de los Almendres, complejo megalítico protegido por la Unesco próximo al pueblo de Nossa Senhora de Guadalupe, que pertenece a Évora.