Este hotel en Grevesmühlen, uno de los pueblos más antiguos de la región de Mecklenburg, es ideal para disfrutar de un día lleno de diversión y actividades deportivas.
Los huéspedes pueden disfrutar de paseos en bicicleta o practicar senderismo en la hermosa campiña, descubrir los lugares de interés de Schwerin, ir de compras a Lübeck o visitar el mar Báltico. También es ideal para los amantes de la historia y la cultura.
El restaurante ofrece hermosas vistas desde la terraza además de deliciosos platos.