El hotel goza de una céntrica ubicación en la plaza de la catedral de Amalfi, a pocos pasos de las playas. Conserva el encanto y la belleza de tiempos pasados.
El vestíbulo y las habitaciones están decoradas con gusto y muestran su carácter mediterráneo en los detalles como los accesorios y los azulejos y cerámicas de Vietri, decorados a mano.