Fin de semana: 3 días en Cádiz

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Ciudad marinera situada en el extremo de una pequeña península, la andaluza Cádiz nos seduce por la riqueza de su patrimonio histórico y por su estilo de vida tranquilo y relajado, muy español. Tres días para recorrerla y explorar sus fortalezas, sus calles comerciales y disfrutar de sus playas urbanas y sus incomparables vistas al mar. ¡En marcha!
Día 1: El centro histórico: catedral y playas bañadas por el Atlántico
- Por la mañana
Entramos en Cádiz por el barrio del Pópulo, el centro histórico de la ciudad, formado por estrechos callejones que desembocan en alguna placita o rematados por un arco medieval. La entrada del barrio se encuentra en la calle San Juan de Dios y está marcada por un arco almohade. El antiguo teatro romano, parcialmente excavado, así como los restos visibles de la antigua muralla medieval dan buena muestra de la dilatada historia de esta ciudad.
A pocos metros de allí se alza la catedral nueva de Cádiz, un imponente edificio barroco coronado por una cúpula amarilla que se ve desde toda la ciudad. Desde lo alto de la torre de Poniente, uno de sus dos campanarios, se pueden apreciar los contornos de la península, casi totalmente rodeada por el mar. Hacemos una parada en el vecino (Museo Catedralicio), donde se exponen piezas de orfebrería, esculturas y cuadros de las iglesias de Cádiz. - Mediodía
En el Mercado Central de Abastos, a cinco minutos de allí, hay cerca de cien puestos. Muchos de ellos ofrecen platos típicos preparados allí mismo a la hora de comer. En Aupa Kadi, se pueden saborear deliciosos pintxos (tapas) vasco-gaditanos, como el de pan de focaccia con pimientos asados, sardinas en vinagre, módena y trocitos de pistacho. Muy cerca, Mariscos Camilo vende deliciosos mariscos y moluscos para llevar a casa. - Por la tarde
Después de comer, se agradece hacer un pequeño descanso en la playa de La Caleta, acurrucada entre dos importantes bastiones del siglo XVII. Dando un paseo por la orilla, acompañados por el ruido de las olas y los graznidos de las gaviotas, podemos ir desde el castillo de Santa Catalina hasta el de San Sebastián, construido sobre un pequeño islote en la otra punta de la playa. Se puede visitar por dentro y disfrutar de las magníficas vistas al mar desde su patio. - Por la noche
Al caer la tarde los bares del barrio de La Viña empiezan a animarse y llenarse de gente. En la calle San Félix, gaditanos y turistas dan buena cuenta de las famosas tortillitas de camarones, típicas de Cádiz. En el discreto restaurante la Marmita de Ancha, la especialidad es el atún rojo de Almadraba que se puede degustar en tartar, tataki o simplemente a la brasa.

La plage de la Caleta, Cadix (Andalousie, Espagne)
Día 2: Torres, museos y calles comerciales en el centro de Cádiz
- Por la mañana
La torre Tavira es el lugar perfecto para empezar este segundo día: esta antigua torre de vigía del siglo XVIII sigue siendo el mejor lugar para contemplar toda la ciudad. Tras una breve ascensión, llegamos a la cámara oscura, un dispositivo óptico que proyecta una vista panorámica de Cádiz sobre una pantalla blanca curva horizontal. Mediante un juego de lentes y espejos cada campanario, cada terraza y cada esquina en sombra cobra vida como en miniatura. Tras la visita, vamos andando hasta la animada Plaza de las Flores, que con sus quioscos y cafeterías y el constante trasiego de gente, nos sumerge de lleno en la vida del barrio. Seguimos hacia la Plaza Mina, más tranquila, con edificios más sobrios y donde el bullicio de la ciudad llega más amortiguado. Aquí estamos muy cerca de los museos.
La cámara oscura de la torre Tavira solo funciona con tiempo despejado. Lo mejor para disfrutar de una imagen nítida de la ciudad es ir antes de las 13 horas, cuando la luz incide directamente.
Al salir de la torre nos acercamos hasta la pastelería Casa Hidalgo, donde podemos encontrar los mejores pasteles de la ciudad: no podemos irnos sin probar el pan de Cádiz, un dulce típico elaborado con masa de mazapán rellena de crema de boniato, yema y fruta confitada.
- Mediodía
A unos cables de la Plaza Mina, se encuentra Almanaque Casa de Comidas ubicada en un antiguo palacio restaurado y con una carta compuesta por originales tapas, productos de temporada y platos del día para compartir. - Por la tarde
Después de comer traspasamos el umbral del museo de Cádiz. En la planta baja se pueden admirar dos sarcófagos fenicios con forma humana que fueron desenterrados de manera fortuita durante unas obras. En las salas del piso superior, dedicadas a la pintura barroca, podemos admirar obras de Zurbarán, Murillo o Alonso Cano. La visita termina con una sección etnográfica más modesta que hace un recorrido por la vida de la Andalucía de los siglos XIX y XX a través de objetos cotidianos, ropa y herramientas. - Por la noche
Para acabar el día, volvemos al barrio de Pópulo para tomar una copita de manzanilla (un vino andaluz blanco y seco) bien fría, acompañada de aceitunas y jamón cortado a cuchillo. En la calle Mesón, una de las más antiguas de Cádiz, abundan las terrazas en las que cenar pescados a la brasa o un delicioso arroz caldoso de marisco.

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Día 3: Jardines, playa urbana y paseo hasta La Cortadura
- Por la mañana
Empezamos la mañana de este último día con un agradable paseo por la alameda Apodaca y la alameda del Marqués de Comillas, dos largos paseos rodeados de jardines y exuberante vegetación con vistas al Atlántico. Allí, el Espacio de Cultura Contemporánea de Cádiz (ECCO) organiza exposiciones de artistas andaluces enfocadas en la transformación social del sur de España. De camino, nos desviamos un poco para visitar el parque Genovés, un encantador jardín del sigo XIX situado junto al mar. - Mediodía
Para comer nos dirigimos a la playa de Santa María del Mar, una de las más agradables del centro. Frente al mar hay numerosos restaurantes que ofrecen platos sencillos a base de productos del mar, como sardinas a la brasa, arroz negro con tinta de sepia o ensalada de pulpo con pimentón. Comer bajo una sombrilla con el murmullo de las olas del Atlántico como telón de fondo es toda una delicia. - Por la tarde
En la playa arranca un paseo que nos lleva hasta La Cortadura, una larga playa de arena, más salvaje, que discurre junto a la carretera. Es la favorita de las familias gaditanas que vienen huyendo de las playas del centro de la ciudad, más abarrotas. La arena retiene el calor del sol hasta última hora de la tarde, pero la continua brisa alivia el calor. - Por la noche
Para esta última cena podemos elegir alguna de las terrazas del paseo Marítimo o improvisar un pícnic en la playa contemplando la puesta de sol: unas empanadas y el murmullo de las olas bastan para poner un tranquilo punto final a nuestra estancia en Cádiz.

Vue sur Cadix et sa nouvelle cathédrale (Andalousie, Espagne)
¿Te quedas un día más?
A unos cuarenta minutos de Cádiz se encuentra Jerez de la Frontera, la capital vitícola de la región. Algunos de los monumentos más importantes de su centro histórico son el Alcázar almohade, la catedral barroca y la iglesia de San Miguel y, por supuesto, no podemos irnos sin visitar una de sus bodegas y probar el vino de Jerez.
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