El lavado sin agua: económico y ecológico

Lavar un coche conlleva un gasto medio de unos 250 litros de agua, una cantidad digna de consideración. Esta es una de las razones por las que, desde hace algunos años, cada vez se habla más del lavado sin agua. Pero ¿en qué consiste exactamente?
El lavado sin agua: económico y ecológico
©baranozdemir/iStock

Lavar sin agua, ¿es realmente posible?

Aunque se haya convertido en una tarea habitual para numerosas personas, el tradicional lavado del coche no está libre de ciertos inconvenientes. Para empezar, está prohibido realizarlo en la vía pública. Además, no es recomendable cuando se padecen temperaturas bajo cero y, todo hay que decirlo, no es ecológico.

Por estos motivos, la solución del lavado sin agua parece la ideal. Pero, en la práctica, ¿se puede realmente limpiar un automóvil sin utilizar una gota de agua?

Por supuesto, un 4×4 que ha efectuado un largo recorrido por un camino embarrado necesitará un lavado más vigoroso que un automóvil urbano que duerme en el garaje. Pero, para este último y para la mayoría de los vehículos de uso común, es posible en efecto un lavado sin agua.

Esta técnica debe diferenciarse del lavado sin aclarado, un método que requiere el uso de una pequeña cantidad de agua.

¿Qué se debe usar para lavar sin agua?

Este procedimiento utiliza productos específicos sin disolventes y totalmente biodegradables. Estos productos contienen tres componentes necesarios para que su acción resulte completa:

  • un detergente que despega la suciedad
  • un lubricante que impide la adhesión de las impurezas
  • un abrillantador que protege y da brillo a la carrocería

En un principio formulados con silicona ─que es volátil y difícil de eliminar cuando es preciso volver a pintar la carrocería─, los productos de lavado sin agua ahora se fabrican principalmente a base de polímeros.

En cuanto a otro material necesario, este procedimiento solo requiere el uso de paños de microfibra, cuya textura posee la particularidad de no rayar las superficies.

¿Cómo lavar un coche sin agua?

El método es muy simple, aunque requiere un poco más de tiempo que el lavado convencional. Este es el procedimiento a seguir:

  • La carrocería debe estar fría.
  • Agitar el recipiente para mezclar bien los componentes del producto.
  • Pulverizar (obrando sobre áreas pequeñas).
  • Dejar actuar el producto durante unos segundos.
  • Utilizar un paño de microfibra empapado en el producto para frotar las zonas que lo necesiten.
  • Limpiar y lustrar con un paño limpio y seco (también de microfibra).

Algunos establecimientos están especializados en el lavado sin agua. Acudir a un profesional aporta muchas ventajas, tales como disponer fácilmente de los productos adecuados y ahorrar algo de tiempo. Algunos profesionales incluso prestan sus servicios a domicilio.

¿Cuáles son las ventajas de lavar sin agua?

¡Son numerosas! A excepción del tiempo dedicado a esa primera limpieza, lavar sin agua ofrece prácticamente solo ventajas:

  • Es ecológico gracias al ahorro de agua que permite y a que los productos que se utilizan son biodegradables.
  • Es económico. Un envase de producto de lavado sin agua cuesta alrededor de 10 € para cuatro pasadas, y los económicos paños de microfibra son lavables y reutilizables.
  • Es práctico, pues los productos se pueden utilizar en todas las superficies (carrocería, parabrisas, etc.).
  • Le devuelve el brillo a la pintura del coche gracias a la cera que contienen los productos.
  • Ofrece un efecto «hidrófobo»: el agua resbala sobre las superficies y la suciedad se adhiere mucho menos.
  • Protege el coche y evita que se ensucie tanto, lo que facilita la siguiente limpieza.

En resumen, el lavado sin agua parece ser la alternativa ecológica y económica a los lavados a presión y a los rodillos. Además, el interés que suscita este método empuja a los fabricantes de productos a competir en innovación y eficacia, lo que mejora el servicio al consumidor final.