Consejos para conducir cuando hay niebla

La niebla es un fenómeno meteorológico que supone un grave peligro para los conductores. La niebla reduce la visibilidad y aumenta el riesgo de sufrir accidentes de circulación. Para evitar este peligro, cada conductor debe adoptar las precauciones que sean necesarias en cada caso. Además, cuando se producen circunstancias meteorológicas excepcionales, como es el caso de la niebla, las normas de seguridad vial recomiendan que el conductor vaya provisto del equipamiento adecuado para no tener problemas durante la conducción.
Consejos para conducir cuando hay niebla
©diephosi/iStock

Reglas de circulación: el uso de las luces cuando hay niebla

El Código de Tráfico y Seguridad Vial establece las normas respecto al uso de las luces antiniebla, distinguiendo entre las luces antiniebla delanteras y las luces antiniebla traseras.

Las luces antiniebla delanteras complementan o reemplazan a las luces de cruce en situaciones de niebla, lluvia intensa o nieve. Su uso también está indicado fuera de las zonas urbanas cuando la visibilidad es escasa, con la condición de cambiar a la luz de cruce lo antes posible, en cuanto las circunstancias lo permitan, para evitar deslumbrar a otros conductores.

Las luces antiniebla traseras están indicadas en casos de niebla o nieve.

Nota: las luces antiniebla aparecieron en los vehículos en la década de 1990. Aunque están presentes en la mayoría de los vehículos modernos, en España su uso no es obligatorio. Por otra parte, un abuso excesivo por parte del conductor de las luces antiniebla puede provocar el riesgo de que le sea impuesta una multa.

¿Cuáles son las recomendaciones para conducir con niebla?

La niebla puede sorprender al conductor y provocar la pérdida de visibilidad, con el riesgo que esto implica de sufrir un accidente. Por ello, para evitar los accidentes, se deben seguir siempre las normas del Código de Tránsito y Seguridad Vial.

Velocidad de conducción con niebla

Se recomienda al conductor reducir la velocidad a 50 km/h en caso de niebla densa, tanto si circula por una carretera de montaña como por una autopista. La reducción de la velocidad debe ser gradual, especialmente en el caso de los vehículos de tráfico pesado o que circulan a gran velocidad. También se debe aumentar la distancia de seguridad respecto al vehículo anterior, para tener suficiente tiempo para frenar en el caso de que fuera necesario.

Advertencia: en el caso de que la visibilidad sea inferior a 50 metros, está prohibido adelantar, incluso en la autopista.

Cambie su conducta a la hora de conducir

La mejor forma de evitar el riesgo de conducir bajo la niebla consiste en posponer la salida. Espere a que salga el sol y a que suban las temperaturas; eso eliminará la niebla. Si no puede esperar o la niebla le sorprende durante el viaje, existen algunos trucos para tener una conducción segura, tanto para usted como para el resto de conductores:

  • Si no llueve, encienda las luces antiniebla.
  • Adopte una velocidad reducida y estable, sin ralentizar demasiado la velocidad.
  • Tome como referencia visual las líneas blancas de la carretera y no el vehículo de delante.
  • Mantenga la distancia de seguridad adecuada para poder frenar en caso de emergencia.
  • No adelante y manténgase situado a la derecha.
  • Aumente la precaución al conducir.
  • Preste atención a la posible aparición de hielo en caso de niebla helada.
  • Abra la ventana en los cruces para percibir mejor los vehículos que se aproximan.

Nota: las luces altas que se utilizan en situaciones de niebla crean un efecto óptico deslumbrante que es peligroso para los conductores que van delante. Deben ser reemplazadas por luces antiniebla o luces de cruce.