Aquaplaning : cómo evitarlo
¿Qué es el aquaplaning ?
También llamado hidroplaning, el aquaplaning es un fenómeno que toma su nombre del verbo “to aquaplane”, en inglés, que significa ‘deslizarse sobre el agua’. Se refiere a la pérdida de adherencia del vehículo cuando los neumáticos entran en contacto con una capa de agua acumulada sobre la calzada.
En general, el aquaplaning sobreviene cuando llueve o cuando la carretera está húmeda tras fuertes precipitaciones. Entonces, los neumáticos no pueden evacuar el agua correctamente y pierden contacto con la carretera, lo que ocasiona la pérdida de control del vehículo, que empieza a deslizarse : en ese momento no se controla la dirección y no se puede frenar ni acelerar. Varios factores pueden provocar el aquaplaning :
- Velocidad excesiva.
- Neumáticos desgastados.
- Calzada en mal estado, que retiene más agua.
- Peso del vehículo (a mayor ligereza, mayor riesgo de aquaplaning).
¿Cómo evitar el aquaplaning ?
A fin de disminuir el riesgo de aquaplaning y conducir con más tranquilidad cuando llueva, le sugerimos que considere los siguientes consejos :
- Desactive el modo crucero (regulador de velocidad) en caso de lluvia.
- Conduzca a una velocidad adecuada : si llueve o conduce por una carretera donde haya charcos, asegúrese de reducir la velocidad ; cuanto mayor sea la velocidad, mayor será la cantidad de agua que tendrán que evacuar los neumáticos.
- Verifique la presión de los neumáticos al menos una vez al mes. Los neumáticos poco inflados o sobreinflados aumentan enormemente el riesgo de aquaplaning.
- Controle regularmente el desgaste de sus neumáticos : los neumáticos lisos y con esculturas menos profundas aumentan las probabilidades de aquaplaning.
Muy importante : los expertos estiman que, a una velocidad de 80 km/h, los neumáticos nuevos son capaces de evacuar una treintena de litros de agua por segundo. Sin embargo, tal rendimiento se desvanece con el tiempo y el desgaste.
¿Cómo actuar en caso de aquaplaning ?
Si se enfrenta a una situación de aquaplaning, ¡no se asuste ! Siga cuidadosamente nuestras recomendaciones para no salir malparado :
- Conduzca con flexibilidad : evite las frenadas demasiado bruscas ; de lo contrario, aumentará el riesgo de derrape.
- Reduzca gradualmente la velocidad : levante suavemente el pie del acelerador. Disminuya la velocidad con el freno motor. A diferencia de un frenado en seco, el freno motor favorece la adherencia de los neumáticos a la ruta.
- Mantenga la dirección correcta : para mantener el rumbo, no gire el volante bruscamente. Asimismo, permanezca con la vista fija en la carretera, enfocando su mirada al punto adonde necesita moverse. Así se reduce el riesgo de chocar con otro coche o cualquier obstáculo presente en la carretera.
Un gesto necesario : si le preceden otros vehículos, prevenga del peligro a los conductores utilizando las luces de emergencia.
El aquaplaning es uno de los muchos peligros a que puede enfrentarse el conductor cuando conduce por una carretera mojada. Sin embargo, acciones sencillas como la conducción cuidadosa y el control periódico de los neumáticos ayudan a reducir los riesgos.
