La opinión de la Guía Michelin
Este antiguo monasterio del s. XII es conocido sobre todo por su espléndido claustro, cuyos historiados capiteles, aunque muy restaurados, siguen siendo un testimonio capital de la escultura románica aragonesa. Se accede a través de la iglesia, que cuenta con algunas pinturas murales, en particular una que representa a David y Goliat. En una capilla románica, pueden verse los sepulcros de los reyes Ramiro II y Alfonso I el Batallador.