En el antiguo ayuntamiento de Bex encontramos hoy un acogedor montaje neoalpino (madera bruta, aperos rurales) dividido en tres partes: el restaurante, un café y un bar de vinos. El chef de la Palette des Sens nos deleita con unos platos muy cuidados, con salsas perfectamente ejecutadas y un uso juicioso de las hierbas aromáticas. Entre las especialidades de la casa podemos citar la rodaja de capón con champiñones, salsa cremosa al vino amarillo, tortita de maíz y castaña confitada. Ambiente encantador y servicio atento.
- Los inspectores de la Guía MICHELIN