Moto: recomendaciones para circular con pasajero

Para quienes están acostumbrados-as a circular en moto, esta no tiene secretos. Sin embargo, se suelen olvidar de que para alcanzar ese dominio de la situación les ha hecho falta horas de aprendizaje y años de experiencia. Compartir con alguien el placer de circular en moto necesita algunas consideraciones. Estos son nuestros consejos…
Moto: recomendaciones para circular con pasajero
©Pixfly/iStock

Preparar al pasajero

Si viajas con un acompañante que no está acostumbrado a la moto, tómate el tiempo de explicarle las reglas básicas: en qué momento subir y bajar, dónde y cómo agarrarse, cómo actuar al acelerar, aminorar, frenar o tomar una curva, etc. Hazlo antes de arrancar, con el motor apagado y el casco quitado para que él o ella pueda oírte bien y hacer las preguntas que sean necesarias. Tu acompañante debe sentirse en total confianza para no convertirse en un estorbo.

Una vez que lo hayas preparado, tocará comprobar el equipamiento: casco correctamente ajustado, cazadora, guantes y calzado cerrado.

Las reglas de seguridad válidas para los pilotos valen también para el acompañante. Procura que tu acompañante vaya protegido no solo contra el viento o la lluvia, sino también contra las consecuencias de una caída. El equipamiento ideal es un casco integral, guantes, calzado alto y ropa resistente.

Si tu acompañante es novato, intenta inspirarle confianza, sobre todo en los primeros minutos. Conduce de forma fluida, sin sacudidas y más despacio de lo habitual. Adáptate para que se sienta en seguridad.

Saber cambiar el estilo de conducción

Si no estás acostumbrado a circular acompañado, no estará de más hacer un pequeño entrenamiento para habituarte a las nuevas condiciones. Llena los neumáticos un poco más (en torno a 0,3 bares más de lo habitual), ajusta la suspensión trasera para compensar el mayor peso que debe aguantar y adapta la altura del faro. Con algunos modelos es más fácil que con otros. Algunos necesitan una herramienta específica que quizá recibiste junto con la moto. Modificar los ajustes de la suspensión puede ser delicado: prueba las diferentes configuraciones y asegúrate de encontrar el ajuste adecuado antes de arrancar el motor.

A propósito de arrancar, circular en pareja disminuye el rendimiento de las aceleraciones y las frenadas. Para adelantar hay que calcular una mayor distancia, y más aún para parar: piensa que no solo pesas más, sino que además las aceleraciones son más fuertes.

Recordatorio para “paquetes” novatos

Resulta esencial mantener una posición a la vez estable, confortable y dinámica. Para ello debes utilizar los mismos puntos de apoyo que el conductor: manos, rodillas y pies.
Los pies (zona más cercana a las puntas que a los talones) deben ir bien apoyados en los reposapiés, las rodillas rectas y pegadas a las piernas del piloto, los muslos ligeramente en tensión y el abdomen contraído. Son las rodillas y los abdominales los que te impedirán salir impelido una y otra vez: hacia adelante en las frenadas, hacia atrás en las aceleraciones. Una comprobación muy simple: tienes que ser capaz de levantarte un poco (despegarte del asiento) sin ayudarte con las manos.

Las manos te servirán únicamente para controlar la parte superior: el esfuerzo realizado por los brazos será menor y te cansarás menos. En general, te puedes agarrar al piloto (sin molestarlo) y a los asideros laterales o traseros

No está prohibido cambiar de postura: la única condición es que siempre que lo hagas, lo hagas con suavidad y avisando. Si estáis parados, de palabra, y si estáis circulando, mediante pequeños movimientos fluidos. Si notas que te cuesta encontrar la postura correcta, más vale que le digas al piloto que pare: será lo más prudente.

Si vas inclinado hacia delante (lo normal en motos de estilo deportivo), tendrás más tendencia a agarrarte al piloto. Un truco para evitar que tu casco choque contra el suyo es apoyar una mano en el depósito. Esto te ayudará a sujetarte y evitará que te vayas hacia delante. De la misma manera, si en las aceleraciones fuertes temes caer hacia atrás, cuando sientas que la moto acelera pon una mano por detrás, con el brazo recto y en tensión, ya sea en el asidero o sobre el asiento. En una moto gran turismo, la postura será más bien recta: muy confortable tanto en ciudad como en carretera, pero con el inconveniente de generar turbulencias a gran velocidad. Cuando esto ocurra, acércate al piloto para protegerte del viento.

No dejes de tener en mente que el momento en que el riesgo de caída es mayor es al parar la moto. Avisa cuando vayas a subir o bajar del asiento. Y no intentes poner los pies en el suelo ante un stop o en un semáforo en rojo: en esos momentos, más que nunca, quien controla el equilibrio de la máquina es el piloto.

En las curvas, el pasajero debe imitar el movimiento, inclinándose en el mismo sentido. Las primeras curvas hay que trazarlas con suavidad para que ambos se vayan habituando a mantener el equilibrio juntos.

Para la comodidad de ambos, comunicaos antes y durante el viaje: sobre las posturas a adoptar dependiendo de cada situación, sobre la duración del viaje, si alguno se siente incómodo o desea parar… El o la piloto no debe olvidar que detrás hace más frío y la fatiga se hace sentir antes.