GLP o GNC, ¿cuáles son las diferencias?

La búsqueda de combustibles sostenibles para el medioambiente es una cuestión que preocupa bastante. Desde este punto de vista, las opciones del GLP y del GNC son muy interesantes. Desde ViaMichelin queremos explicarle las ventajas y desventajas de cada uno de estos combustibles y en qué se diferencian.
GLP o GNC, ¿cuáles son las diferencias?
©kzenon/iStock

GLP: ventajas y desventajas

El GLP, o gas licuado de petróleo, es una mezcla de dos gases: butano y propano. Este combustible ha demostrado tener muchas ventajas:

  • Es en torno a un 50 % más barato que la gasolina o el diésel.
  • Tiene un impacto muy reducido en el medioambiente, dado que emite poco CO₂ y óxido de nitrógeno.
  • Produce menos partículas finas que contaminan el aire.
  • Reduce los gastos de mantenimiento del motor.
  • Proporciona una enorme autonomía gracias al funcionamiento con dos combustibles que ofrecen los vehículos con GLP.

La combustión con GLP, eso sí, requiere de una adaptación técnica que puede ser bastante costosa al principio.

GNC: ventajas y desventajas

El gas natural comprimido, es un gas renovable que resulta de un proceso en el que se emplea metano. Se considera el combustible del futuro gracias a sus ventajas frente a los derivados del petróleo:

  • Es un 30 % más barato que el diésel.
  • Permite obtener certificados medioambientales con menor gasto.
  • Genera mucho menos CO₂ que un motor convencional.
  • Emite muy poco óxido de nitrógeno y escasas partículas finas.

Sin embargo, el GNC todavía está poco desarrollado y faltan muchos puntos de repostaje, por lo que es difícil abastecer a los vehículos que lo emplean.

De esta forma, el GLP y el GNC son dos opciones muy interesantes a la hora de ahorrar y conducir vehículos más sostenibles. Con todo, aún son minoritarios en España los motores que los usan, aunque la cifra va aumentando a muy buen ritmo.